El costo de los servicios públicos en los hogares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) volvió a escalar durante junio. Según un informe elaborado por el Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP UBA-Conicet), el gasto mensual aumentó un 10,6% respecto del mes anterior, lo que obligó a una familia promedio sin subsidios a desembolsar $183.496 para cubrir los servicios esenciales de energía, agua y transporte.
Este nuevo incremento se suma a la suba del 16,8% registrada en mayo, cuando el costo de esa misma canasta había alcanzado los $166.559. De esta manera, el gasto acumulado desde abril consolida una dinámica ascendente, motorizada tanto por el alza de las tarifas en todos los rubros como por el aumento en los niveles de consumo, especialmente a partir de la llegada del invierno.
En particular, el informe del IIEP identifica dos factores centrales que explican la suba de junio. Por un lado, las actualizaciones en los cuadros tarifarios de todos los servicios públicos; por otro, el crecimiento en la demanda de energía eléctrica y gas natural, asociado al período invernal.
En el caso del agua potable, además del ajuste en las tarifas, el estudio menciona una leve reducción en el consumo como consecuencia de la menor cantidad de días del mes: junio tiene un día menos que mayo, lo que también influyó en el cálculo final.
Respecto del gas natural, el informe precisa que el cargo fijo aumentó un 3,5% y el cargo variable un 2,5%. A su vez, el volumen consumido se incrementó de forma considerable debido a la mayor necesidad de calefacción. En el caso de la energía eléctrica, el consumo también creció en relación con mayo, acompañado por una suba del 3,3% en el cargo fijo y del 2,8% en el variable.
Por otra parte, el transporte público también registró subas durante junio. El boleto de las líneas urbanas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) aumentó un 4,8%, como resultado de la fórmula de actualización vigente, que contempla el Índice de Precios al Consumidor (IPC) más un adicional del 2%.
En paralelo, las líneas interjurisdiccionales, que dependen del Gobierno nacional, aplicaron un incremento del 7%. Como consecuencia de ambas variaciones, el costo promedio ponderado del boleto alcanzó en junio un aumento del 5,8%.
De esta manera, la variación interanual del costo total de la canasta de servicios públicos en el AMBA alcanzó en junio un 38%, una cifra que se ubica prácticamente en el mismo nivel que el índice de inflación general del período, que fue del 39%.
Este comportamiento, según el análisis del IIEP, confirma una tendencia ya registrada en mayo, en la que los aumentos en las tarifas de los servicios públicos comenzaron a alinearse con la evolución general de los precios.
Al desglosar el impacto por rubro, el transporte lidera los aumentos interanuales con una suba del 63%, seguido por el agua, con un 39%. En tanto, la electricidad y el gas natural mostraron variaciones más moderadas, del 24% cada uno.
En términos de incidencia sobre el incremento general, el gasto en transporte explicó 19 de los 38 puntos porcentuales que representa el alza interanual total. Por su parte, la electricidad, el agua y el gas aportaron 6 puntos porcentuales cada uno.
El estudio elaborado por el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP UBA-Conicet) también examinó el nivel de cobertura de los costos de los servicios públicos que afrontan los hogares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). En promedio, los usuarios cubren el 54% del valor real de las tarifas, mientras que el Estado se hace cargo del 46% restante mediante subsidios.
Además, el informe también realizó un análisis retrospectivo desde la asunción del presidente Javier Milei. En ese lapso, comprendido entre diciembre de 2023 y junio de 2025, el costo de la canasta de servicios públicos en el AMBA se incrementó un 561%, un ritmo muy superior al del índice general de precios, que acumuló una suba del 150% en el mismo período.
Entre los servicios que más aumentaron se destaca el gas natural, con una suba acumulada del 1.482%, seguido por el transporte público, que escaló un 729%. El agua, en tanto, registró un incremento del 343% y la electricidad se ubicó en un 316%, consolidando una tendencia de aumentos generalizados en los principales componentes de la canasta.
Finalmente, el relevamiento también calculó el impacto que este conjunto de servicios tiene sobre los ingresos de los hogares. En junio, el costo total de la canasta representó el 12,7% del salario promedio registrado, estimado en $1.445.000 para ese mes. Este dato, según el IIEP, refleja el peso creciente de las tarifas en la economía doméstica y en la planificación de los gastos mensuales de las familias del AMBA.
